jueves, 10 de diciembre de 2015

Lección 24 | El espíritu de profecía

El enemigo nos está siguiendo. Debemos estar bien despiertos, en guardia contra él. Debemos revestirnos de toda la armadura de Dios. Debemos seguir las indicaciones dadas por medio del espíritu de profecía. Debemos amar y obedecer la verdad para este tiempo. Esto nos salvará de aceptar fuertes engaños. Dios nos ha hablado mediante su Palabra. Nos ha hablado por medio de los testimonios dados a la iglesia, y por medio de los libros que han contribuido a aclarar nuestro deber actual y la posición que debemos ocupar ahora. Deben oírse las amonestaciones que han sido dadas,… Si las pasamos por alto, ¿qué excusa podremos presentar?” Obreros Evangélicos, pág. 323.

PROMESAS PARA EL PUEBLO DE DIOS
1......¿Cuál es una de las grandes promesas que el Señor hizo a Israel siglos antes de la era cristiana?
Isaías 44:3.- Porque yo derramaré aguas sobre el sequedal, y ríos sobre la tierra árida; mi Espíritu derramaré sobre tu generación, y mi bendición sobre tus renuevos.
Ezequiel 39:29.- Ni esconderé más de ellos mi rostro; porque habré derramado de mi Espíritu sobre la casa de Israel, dice Jehová el Señor.
En su Palabra, Dios comunicó a los hombres el conocimiento necesario para la salvación. Las Santas Escrituras deben ser aceptadas como dotadas de autoridad absoluta y como revelación infalible de su voluntad. Constituyen la regla del carácter; nos revelan doctrinas, y son la piedra de toque de la experiencia religiosa. ‘Toda la Escritura es inspirada por Dios; y es útil para enseñanza, para reprensión, para corrección, para instrucción en justicia; a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, estando cumplidamente instruido para toda obra buena’ (2 Timoteo 3:16, 17).
“La circunstancia de haber revelado Dios su voluntad a los hombres por su Palabra, no anuló la necesidad que tienen ellos de la continua presencia y dirección del Espíritu Santo. Por el contrario, el Salvador prometió que el Espíritu facilitaría a sus siervos la inteligencia de la Palabra; que iluminaría y daría aplicación a sus enseñanzas. Y como el Espíritu de Dios fue quien inspiró la Biblia, resulta imposible que las enseñanzas del Espíritu estén jamás en pugna con las de la Palabra(El Conflicto de los Siglos, pág. 9).

2......¿Qué declaró el Señor mediante otro profeta? ¿A qué tiempo se refiere esta profecía?
Joel 2:28-30.- (28) Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones. (29) Y también sobre los siervos y sobre las siervas derramaré mi Espíritu en aquellos días. (30) Y daré prodigios en el cielo y en la tierra, sangre, y fuego, y columnas de humo.
El Espíritu no fue dadoni puede jamás ser otorgadopara invalidar la Biblia; pues las Escrituras declaran explícitamente que la Palabra de Dios es la regla por la cual toda enseñanza y toda manifestación religiosa debe ser probada. El apóstol Juan dice: ‘No creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo’ (1 Juan 4:5). E Isaías declara: ‘¡A la ley y al testimonio! Si no dijeren conforme a esto, es porque no les ha amanecido’ (Isaías 8:20)(El Conflicto de los Siglos, págs. 9, 10).

EL TIEMPO DEL CUMPLIMIENTO
3......¿Cuándo ocurrió el primer derramamiento del Espíritu Santo al que se refiere el versículo anterior? ¿Cómo señala hacia el tiempo del fi n la referencia al libro de Joel mencionada en Hechos?
Hechos 2:16-18.- (16) Mas esto es lo dicho por el profeta Joel: (17) Y en los postreros días, dice Dios, derramaré de mi Espíritu sobre toda carne, y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán; vuestros jóvenes verán visiones, y vuestros ancianos soñarán sueños; (18) Y de cierto sobre mis siervos y sobre mis siervas en aquellos días. Derramaré de mi Espíritu, y profetizarán.
El Señor anunció por boca del profeta Joel que una manifestación especial de su Espíritu se realizaría en el tiempo que precedería inmediatamente a las escenas del gran día de Dios. Joel 2:28. Esta profecía se cumplió parcialmente con el derramamiento del Espíritu Santo, el día de Pentecostés; pero alcanzará su cumplimiento completo en las manifestaciones de la gracia divina que han de acompañar la obra final del Evangelio(El Conflicto de los Siglos, pág. 12).

4......En su sermón durante Pentecostés, ¿cómo confirmó el apóstol Pedro que esta promesa no estaba limitada al tiempo apostólico si no que se extendía a los últimos días?
Hechos 2:38, 39.- (38) Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo. (39) Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare.
Después de la maravillosa manifestación del Espíritu Santo, el día de Pentecostés, San Pedro exhortó al pueblo al arrepentimiento y a que se bautizara en el nombre de Cristo, para la remisión de sus pecados; y dijo: ‘Recibiréis el don del Espíritu Santo. Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare’ (Hechos 2:38, 39)… “Según la Palabra de Dios, el Espíritu Santo debía continuar su obra por todo el período de la dispensación cristiana(El Conflicto de los Siglos, págs. 11, 12, 10).

EL PUEBLO REMANENTE Y EL DON DE PROFECÍA
5......¿Qué don espiritual fue profetizado en apoyo al pueblo remanente de los últimos días?
Apocalipsis 12:17; 19:10.- (12:17) Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo(19:10) Yo me postré a sus pies para adorarle. Y él me dijo: Mira, no lo hagas; yo soy consiervo tuyo, y de tus hermanos que retienen el testimonio de Jesús. Adora a Dios; porque el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía.
“‘Entonces el dragón se enfureció contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el remanente de la simiente de ella, los cuales guardan los mandamientos de Dios, y tienen el testimonio de Jesucristo’. Esta profecía señala claramente que la iglesia remanente reconocerá a Dios en su ley y tendrá el don profético. La obediencia a la ley de Dios y el espíritu de profecía han distinguido siempre al verdadero pueblo de Dios y la prueba usualmente es dada mediante manifestaciones presentes(Loma Linda Messages, pág. 33).

PROPÓSITO DEL DON DE PROFECÍA
6......¿Cuál es el propósito del Señor al enviar a su pueblo sus profetas y profecías? ¿Qué llamado es hecho con relación a la luz y a la palabra profética?
2 Pedro 1:19.- Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones.
“‘La Palabra de Dios basta para iluminar la mente más oscurecida, y puede ser entendida por los que tienen deseos de comprenderla. No obstante todo eso, algunos que profesan estudiar la Palabra de Dios se encuentran en oposición directa a sus más claras enseñanzas. Entonces, para dejar a hombres y mujeres sin excusa, Dios da testimonios claros y señalados, a fin de hacerlos volver a la Palabra que no han seguido’. ‘La Palabra de Dios abunda en principios generales para la formación de hábitos correctos de vida, y los testimonios, generales y personales, han sido calculados para atraer su atención más especialmente a esos principios’” (Testimonios para la Iglesia, tomo 5, pág. 623).

BENDICIONES PARA AQUELLOS QUE CONFÍAN EN LOS MENSAJES DE LOS PROFETAS
7......¿Qué sucede cuando el don de profecía no es accesible o no es aceptado? ¿Cómo serán bendecidos aquellos que confían en los profetas del Señor y aceptan sus mensajes?
Proverbios 29:18.- Sin profecía el pueblo se desenfrena; mas el que guarda la ley es bienaventurado.
2 Crónicas 20:20.- Y cuando se levantaron por la mañana, salieron al desierto de Tecoa. Y mientras ellos salían, Josafat, estando en pie, dijo: Oídme, Judá y moradores de Jerusalén. Creed en Jehová vuestro Dios, y estaréis seguros; creed a sus profetas, y seréis prosperados.
El apóstol amonestó a los tesalonicenses a no despreciar el don de profecía, y con las palabras: ‘No apaguéis el Espíritu. No menospreciéis las profecías. Examinadlo todo; retened lo bueno’, les ordenó que distinguieran cuidadosamente entre lo falso y lo verdadero. Les mandó que se abstuvieran de ‘toda especie de mal’; y termina su carta con la oración de que Dios los santifique en todo, para que su ‘espíritu y alma y cuerpo sea guardado entero sin reprensión para la venida de nuestro Señor Jesucristo. Fiel es el que os ha llamado –añadió–; el cual también lo hará’ ” (Los Hechos de los Apóstoles, pág. 214).
“… debemos seguir las directivas que nos han sido dadas por el espíritu de profecía. Debemos amar la verdad presente y obedecerla. Esto nos preservará de aceptar graves errores. Dios nos ha hablado por su Palabra, por los testimonios enviados a la iglesia y por los libros que han contribuido a explicar nuestro deber presente y la posición que debiéramos ocupar actualmente” (Testimonios para la Iglesia, tomo 8, págs. 312, 313).

PARA UN ESTUDIO ADICIONAL
Estamos viviendo en los últimos días, en un tiempo cuando podemos esperar mucho de parte del Señor. Estas palabras [Joel 2:28] debe llevarnos al trono de la gracia para suplicar grandes cosas de Él. Aquí se da la promesa que el Espíritu Santo vendrá sobre los hombres y las mujeres y sobre nuestros hijos e hijas; ‘y sucederá que todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo’. Esto nos muestra una maravillosa obra que ha de ser hecha, para la cual necesitamos cada día el poder convertidor de Dios en nuestros corazones. Es nuestro privilegio experimentar esto. El cielo está lleno de bendiciones y es nuestro privilegio solicitar que las ricas promesas de Dios se cumplan en nosotros mismos. Necesitamos buscar al Señor día y noche para que podamos conocer exactamente los pasos que debemos dar y lo que debemos hacer(My Life Today, pág. 62).
“Durante las épocas en que las Escrituras tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento eran entregadas a la circulación, el Espíritu Santo no dejó de comunicar luz a individualidades aisladas, amén de las revelaciones que debían ser incorporadas en el Sagrado Canon. La Biblia misma da cuenta de cómo, por intermedio del Espíritu Santo, ciertos hombres recibieron advertencias, censuras, consejos e instrucción que no se referían en nada a lo dado en las Escrituras. También habla de profetas que vivieron en diferentes épocas, pero sin hacer mención alguna de sus declaraciones. Asimismo, una vez cerrado el canon de las Escrituras, el Espíritu Santo debía llevar adelante su obra de esclarecimiento, de amonestación y consuelo en bien de los hijos de Dios(El Conflicto de los Siglos, págs. 10, 11).



2 comentarios:

  1. Estimados amigos por motivos de fuerza mayor, esta semana se esta publicando la leccion por este enlace https://es.scribd.com/.../Leccion-25-El-Templo-de-Dios
    https://es.scribd.com/.../Leccion-25-El-Templo-de-Dios
    http://www.4shared.com/file/GZ2Nqfl7ce/Leccin_25_-_El_templo_de_Dios.html
    http://www.4shared.com/file/gTUf1Isuce/Leccin_25_-_El_templo_de_Dios.html

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  2. Entrar al face de Maximo Vereau Gutierrez o Paulino Saldaña o Luis Miranda Pumacayo... alli también encontraran los enlaces.

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